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Artículos gastronómicos
Como elegir un buen queso
Ene
Según datos del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, los españoles consumimos de media al año casi 9 kilos de queso por persona. Y no es de extrañar, porque casi todo el mundo adora el queso, ya que dentro de sus muchísimas variedades seguro que hay una que encaja a la perfección con cada gusto personal, y eso hace de este lácteo un alimento único.
Como elegir un buen queso Gourmet
Podemos encontrar quesos que varían en cuanto a aroma, sabor o textura, con unas características concretas que nos ayudan a acertar a la hora de elegir un buen queso según nuestro estilo o dejarnos aconsejar para experimentar y probar nuevas variedades.
Desde la centraldelgourmet.com queremos darte unos pequeños consejos de características a tener en cuenta en un queso a la hora de comprar un queso gourmet.
El aspecto exterior es lo primero que entra siempre por los ojos. Normalmente, nos dejamos llevar por la forma en la que están presentados los quesos en un espacio, su geometría, su color, su tono uniforme o de varios colores, etc. Cuando tenemos delante un queso curado o semicurado presentan grietas en su superficie, en cambio los frescos son más lisos y homogéneos.
El borde también nos puede aportar información, pues si tiene un tono más claro que la parte interna significa que le falta maduración. En la gama de quesos con ‘agujeros’ como el Gouda, fijarnos en cómo están distribuidos dichos orificios nos dará mucha información. Deben de estar dispuestos uniformemente y con un tamaño grande para saber que está elaborado correctamente. La textura es una variable también muy importante. Aunque sea algo muy obvio, los quesos blandos deben ser tierno y los curados más duros. Si la textura es poco compacta, encontraremos una pieza que indica falta de maduración. Después de observar el estado externo del queso, pasamos a la parte olfativa.
Los mejores quesos gourmet
Conocer el aroma del queso, aunque sea un detalle más subjetivo, nos puede aportar mucho. Un queso blando debe tener un olor más suave y un tipo mohoso debe ser más terroso e intenso. Por último, pasamos al sabor, el sentido que más nos puede ayudar a elegir el queso correcto. La degustación es un momento clave, pues con ella sabremos qué tipo de queso es el que más nos agrada al gusto. Si preferimos algo más de picor nos decantaremos por quesos azules o curados, pero si nos gusta lo suave, iremos por semicurados o blandos. Nunca debe exceder ni el sabor a leche ni el picor, pues eso nos dirá que el queso no está en su estado óptimo.
Otro detalle lo encontramos en la tendencia del queso en pegarse al paladar cuando lo ingerimos. Cuando encontramos un queso en buen estado, no se debe pegar al paladar, pero si ha excedido su curación, puede que lo encontremos más seco y difícil de comer.
Además de estos aspectos importantes cuando vamos a elegir una pieza de queso para comprarla, debemos revisar las etiquetas de caducidad del producto, asegurándote que no está vencidos o que está cerca su fecha límite de caducidad. Este dato es importante conocerlo, pues así sabremos de cuánto tiempo disponemos para su consumo o si debemos descartarlo directamente.
Cuando ya tenemos el queso perfecto, por el que sentimos predilección, tenemos que tener en cuenta cuál es la cantidad que vamos a comprar. No es lo mismo comprar queso para una sola persona, que para una familia al completo o una cena con amigos.
Sea cual sea el tamaño de la pieza que nos llevemos a casa, siempre debemos quitar su envoltorio original de la tienda y cambiarlo por otro papel encerado o de pergamino que nos asegurará que vamos a mantenerlo en unas condiciones óptimas de conserva.
Si seguimos estos simples pasos a la hora de elegir y comprar un queso, podremos deleitarnos con un manjar muy sabroso y que se ajusta a nuestros gustos alimenticios. Un alimento que ha enamorado ya a millones de personas en todo el mundo y que es un básico indispensable en toda nevera que se precie.
